El Gobierno del Reino Unido ha incrementado sus esfuerzos para combatir la inmigración ilegal, registrando un aumento del 73% en las detenciones en comparación con el año anterior.
En enero, se realizaron 828 operativos en diversos sectores, incluyendo salones de manicura, restaurantes y estaciones de lavado de coches, resultando en la detención de 609 personas.
Estas operaciones, lideradas por equipos de inmigración del Home Office, abarcaron varias regiones del país, como Cheshire y el sur de Londres. Los detenidos incluyen migrantes que llegaron a través de diferentes rutas, como cruces del canal de la Mancha o con visados caducados.
La ministra del Interior, Dame Angela Eagle, defendió la decisión del Gobierno de publicar imágenes de las redadas, enfatizando la importancia de enviar un mensaje claro a quienes han sido engañados por falsas promesas sobre la vida en el Reino Unido.
Además, el Gobierno ha endurecido las sanciones para los empleadores que contraten a trabajadores ilegales, emitiendo 1,090 multas en los últimos siete meses, con sanciones que pueden alcanzar las £60,000 por trabajador. Desde el inicio del gobierno laborista en julio, se han realizado 3,930 detenciones en 5,424 visitas de agentes de inmigración.
El Home Office también llevó a cabo cuatro vuelos de deportación masiva, expulsando a más de 800 personas, lo que marca un hito en la historia reciente del país. Sin embargo, el debate sobre la inmigración sigue generando controversia en el Parlamento. El Partido Conservador ha propuesto enmiendas a la ley de inmigración, mientras que el líder de Reform UK, Nigel Farage, considera que las medidas son insuficientes.
Algunos sectores políticos abogan por establecer rutas legales y seguras para los migrantes, en lugar de centrarse únicamente en redadas y deportaciones. En respuesta, el Gobierno ha lanzado una campaña en redes sociales dirigida a Vietnam y Albania, destacando testimonios de migrantes que enfrentaron condiciones precarias tras intentar ingresar ilegalmente al país.
Esta semana, se debatirá en la Cámara de los Comunes el Proyecto de Ley de Seguridad Fronteriza, Asilo e Inmigración, que busca fortalecer las medidas contra las redes de tráfico de personas en el canal de la Mancha.
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